Las confesiones religiosas han expresado su parecer acerca de la situación del país en una declaración pública titulada “un llamado a la paz”. Preocupan a los dirigentes religiosos, “los innumerables casos de corrupción que han afectado de manera transversal a diversas instancias públicas y privadas, con escándalo de los ciudadanos, por el mal ejemplo y la deshonestidad, precisamente de aquellos que tienen un particular compromiso con el bien común”. En el trasfondo de esta advertencia, está la falta de honradez…