La instancia se realizará en la Diócesis de San Bernardo el 26 de octubre del presente año, y se convoca a los sacerdotes, religiosos y religiosas, diáconos, seminaristas, y delegados laicos de las parroquias e instituciones eclesiales y de los estamentos pastorales de la diócesis.
En una carta enviada por Monseñor Juan Ignacio González señala que ” Como Iglesia particular, nuestra Diócesis de San Bernardo, también quiere seguir este caminar juntos en el anuncio el Evangelio, en plena identificación y fidelidad con las enseñanzas de la Iglesia y en comunión con el Vicario de Cristo, el Santo Padre Francisco, y por ello, luego de consultar el Consejo de Presbiterio y al Consejo Episcopal de Gobierno, hemos querido convocar a esta II Jornada Sinodal Diocesana, en que juntos iremos aprendiendo a vivir cada día mejor la comunión en la vida de la Iglesia. Como sabemos, “el concepto de comunión (koinonía), ya puesto de relieve en los textos del Concilio Vaticano II, es muy adecuado para expresar el núcleo profundo del Misterio de la Iglesia y, ciertamente, puede ser una clave de lectura para una renovada eclesiología católica. La profundización en la realidad de la Iglesia como Comunión es, en efecto, una tarea particularmente importante, que ofrece amplio espacio a la reflexión teológica sobre el misterio de la Iglesia, cuya naturaleza es tal que admite siempre nuevas y más profundas investigaciones”.
Los objetivos fundamentales de la Jornada Sinodal Diocesana serán:
a) Renovar nuestra fe en el misterio de la Iglesia como Sacramento de Salvación para todos los hombres, “nacida del amor del Padre Eterno, fundada en el tiempo por Cristo Redentor, reunida en el Espíritu Santo, la Iglesia tiene una finalidad escatológica y de salvación, que sólo en el siglo futuro podrá alcanzar plenamente” (GS, 40) y;
b) Hacer un fraterno intercambio acerca de los trabajo y esfuerzos que estamos llevando adelante “para cumplir esta misión, pues es deber permanente de la Iglesia escrutar a fondo los signos de la época e interpretarlos a la luz del Evangelio, de forma que, acomodándose a cada generación, pueda responder a los perennes interrogantes de la humanidad sobre el sentido de la vida presente y de la vida futura y sobre la mutua relación de ambas. Es necesario por ello conocer y comprender el mundo en que vivimos, sus esperanzas, sus aspiraciones y el sesgo dramático que con frecuencia le caracteriza. He aquí algunos rasgos fundamentales del mundo moderno” (Ibidem n. 4)
La realización del esta Jornada Sinodal Diocesana, estará antecedida por un trabajo pastoral en cada una de las parroquias e instituciones a las que pertenecen las personas convocadas, que sea preparatoria de la misma, mediante tiempo de oración ante el Señor Sacramentado, el rezo en familia y comunitariamente del Santo Rosario y un temario para el trabajo de las comunidades que será proporcionado por la comisión preparatoria.