Señaló Monseñor Juan Ignacio González a los fieles presentes, este domingo 13 de diciembre, en la ceremonia de apertura de la Puerta Santa de la Iglesia Catedral, inaugurando el Jubileo de la Misericordia en la Diócesis.
La ceremonia se inició con una solemne procesión desde el frontis de la Ilustre Municipalidad, lugar en el cual se congregaron cientos de fieles de todos los rincones de esta sede eclesiástica.
Una vez abierta la Puerta Santa hizo ingreso el sr, Obispo, sacerdotes, religiosas y pueblo fiel, que participaron de la celebración de la Eucaristía.
En su homilía el Obispo de San Bernardo señaló que: “El Papa Francisco quiere que toda la Iglesia camine por esta senda de la Misericordia de Dios, como Pastor supremo de la Iglesia ha visto necesario que el bálsamo de la misericordia del Señor caiga sobre el mundo, sobre la iglesia y cada uno de nosotros, porque todos necesitamos de su misericordia, por eso ha convocado este jubileo extraordinario, momento de gracia. Nos ha pedido a los ministros del Señor que estemos especialmente atentos a nuestros hermanos, que nos hagamos servidores de todos sin distinción”.
Al finalizar la ceremonia litúrgica Mons. Juan Ignacio entregó a las familias representante de cada parroquia un Altar de la Misericordia que peregrinará, durante todo el año jubilar, en los hogares de las distintas comunidades parroquiales de la Diócesis.
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