Señaló Monseñor Juan Ignacio González a todos los fieles presentes durante la ceremonia de consagración del altar de la parroquia San José en la localidad de Pintué.
Muy emocionados y alegres se encontraban asistentes a la Eucaristía, en la cual el Obispo de San Bernardo inauguró oficialmente el templo, que había quedado seriamente dañado tras el terremoto del 27F.
La ceremonia se inició en el frontis de la parroquia, Monseñor Juan Ignacio agradeció el apoyo brindado a Diego Vergara, Alcalde de Paine, Mauricio Ahlers, Ministerio de la Cultura y las Artes, y al staff de arquitectos y constructores que hicieron posible la reparación de este centenario templo. Luego entregó las llaves a su párroco, Padre Marcelo Olate para dar inicio al Rito Eucarístico.
El regocijo embargó a muchos de los presentes, ya que se pensó que la Iglesia iba a ser demolida por su deterioro estructural, pero tras tres años de arduo trabajo se logró reconstruir en su totalidad.
En su homilía, Monseñor Juan Ignacio González señaló que los templos son el patrimonio espiritual y son el corazón de la vida de un sector. Además destacó el carácter patrimonial de la Iglesia San José de Pintué, que fue diseñada y construida por el arquitecto catalán José Forteza en el año 1913 y gracias al esfuerzo de los arquitectos y constructores el templo pudo retomar su estructura original de hace 100 años.
Luego se colocó en el altar la reliquia de San Alberto Hurtado, para luego dar paso al rito bendición, que comenzó con oración de dedicación, el nuevo altar fue ungido con el Santo Crisma, al igual que los muros del nuevo templo, para luego celebrar la Santa Misa.
Con aplausos finalizó la ceremonia. Ya en el frontis de la parroquia se escucharon los primeros acordes de la guitarra que dieron inicio al pie de cueca que se brindó para todos los invitados presentes.
