Los criterios para enfrentar los casos de abusos sexuales contra menores por parte de algunos sacerdotes en Chile, y las lecciones que nos deja el terremoto como país, son algunos de los aspectos contenidos en el Mensaje de los Obispos de Chile al concluir su reciente Asamblea Plenaria.
En su reunión, celebrada entre el 12 y el 16 de abril en Punta de Tralca, los pastores agradecieron al Santo Padre Benedicto XVI sus muestras de afecto y cercanía hacia la Iglesia y al pueblo chileno, especialmente su oración y palabras de consuelo tras el terremoto y maremoto; y su precioso regalo, la imagen de la Virgen del Carmen Misionera, que ha empezado a peregrinar por el país llevando el Evangelio de Chile.
Los pastores expresaron que la catástrofe que vivió el país el pasado 27 de febrero ha marcado dolorosamente la vida de muchas personas, familias y comunidades eclesiales. “Esta tragedia nos ha puesto como frente al espejo de lo que realmente somos: con nuestras virtudes y debilidades. Así como ha expresado valores profundos de nuestra identidad como país, también plantea preguntas sobre la forma en que nos relacionamos como familia, como vecinos, como comunidad. Es el momento de hacer un análisis sereno y profundo de las causas de estos hechos”, sostienen.